Tras la victoria del partido de izquierdas Syriza en las elecciones griegas del pasado mes de enero, se han
sucedido los titulares sobre los encuentros y desencuentros entre el equipo económico del nuevo
Gobierno heleno y las distintas instituciones que conforman la famosa Troika (pero sin mencionar a los que se encuentran en la sombra). Los medios de comunicación haciendo como hacen su trabajo, nos han estado informando capítulo a capítulo: como si de un drama o folletín se tratara, sobre los avances, las intrigas, los gestos, las mentiras, los hechos y las
conversaciones que iban transcurriendo. Sin olvidar el glamour de alguno de sus protagonistas. Siempre con la sacrosanta deuda encima
de la mesa.
Pero ¿qué deuda tiene occidente con la cultura y la historia del pueblo griego, cuna de nuestra civilización? Deberíamos hacer un ejercicio de introspección y valorar cómo el legado heleno ha configurado nuestra cultura política, filosófica, científica, artística, dramática …. ¿Cuántos conceptos ( Europa, democracia, política ...) que utilizamos habitualmente tienen su orígen en la Grecia clásica? ¿Y cuántas palabras, su raíz etimológica?
Pero ¿qué deuda tiene occidente con la cultura y la historia del pueblo griego, cuna de nuestra civilización? Deberíamos hacer un ejercicio de introspección y valorar cómo el legado heleno ha configurado nuestra cultura política, filosófica, científica, artística, dramática …. ¿Cuántos conceptos ( Europa, democracia, política ...) que utilizamos habitualmente tienen su orígen en la Grecia clásica? ¿Y cuántas palabras, su raíz etimológica?
Vamos, que mientras unos imponen
sus intereses (entiéndase económicos), otros exponen sus argumentos.